lunes, 17 de noviembre de 2008

Warhol y el exceso de la belleza


FACTORY GIRL (2006)
Mal escrito por: NunaWayra

La Fábrica de Andy Warhol, el ambiente vanguardista y underground del arte neoyorquino, donde un cine extrovertido bajo expresiones hechas por vacías sopas de tomate en lata sucunden a las noches libertinas de un territorio poblado por estrafalarios, drogadictos y fantasmas de rincon; habitantes de algunas mesetas desconocidas fuera del mapa élite del ambiente artístico de la metrópoli estadounidense. La belleza de Edith Sedgwick (Siena Miller), versión warholiana de la superestrella salvaje, transformo el submundo de La Fábrica en el epicentro por el que los artistas transformados en observadores aplauden la belleza salvaje de Eddie. La película busca el retrato de los últimos años de Sedgwick, joven millonaria y anoréxica transformada en musa por el rey del pop-art, centrada principalmente en el lazo afectivo entre Eddie y Andy hasta su fugaz deceso a los 28 años por una sobredosis de barbitúricos. Narrado a momentos por una recompuesta Sedwick, algunas confesiones católicas de Warhol a un sacerdote; el filme recrea a un Warhol villano un Billy Quinn , eufemismo hilarante de un Bob Dylan que amenazó al director si osara utilizar su nombre durante el rodaje. como angel liberador. Nostalgia y drogas, flashes depresivos de un ambiente tan poco comprendido que hoy despues de generaciones absurdas un ser tan hermético y frágil como Eddie Sedgwick genera una dicotomía emocional, como diva, como mujer, como un débil cristal, como algo de ese ocaso... no el de la muerte física, el del café frío que nos indica un una mañana como hoy, que es la mirada humana la que no indica exactamente un fenómeno físico... mucho menos racional.

NO RECOMENDABLE.

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